Crema de Auyama
por Veronica25 de Octubre de 2006
Recetas, Sopas, Vegetariano | 7 comentarios | Trackback

Es una de mis cremas favoritas y una entrada excelente para cualquier comida. Es tan sencilla y divina que lo único que puede mejorarla es la presentación para lo que les doy un par de buenas ideas al final.
Esta crema puede ser también de apio ó de papa, sustituyendo la auyama por uno de estos ingredientes.
Ingredientes:
- 1 mitad de auyama (calabaza) bien lavada, sin piel y cortada en piezas pequeñas
- 3 tazas de agua
- 1 taza de caldo de pollo (opcional, pero le da bastante gusto)
- 1 cebolla pequeña sin piel y bien lavada
- 1 rama de ajoporro (puerro) bien lavado
- 3 ají dulces (pimientos) pequeños lavados y sin semillas
- 1 cuchara de perejil picadito
- Sal y pimienta gourmet
Preparación:
Se coloca el agua a hervir con los trozos de auyama, la cebolla cortada en 4, los ají dulces, la rama de ajoporro (ó puerros) hasta que todo ablande. El agua se resumirá un poco. Dejar enfriar un poco para que sea más fácil licuar todo sin que el vapor te queme.
Ir pasando la auyama y el resto de los ingredientes con la taza de caldo de pollo a la licuadora, en pequeñas porciones e ir licuando bien añadiéndo un poquito de sal al gusto hasta haber licuado todo lo que había en la olla (incluyendo el agua). A medida que se va licuando tener cuidado que no se pónga muy líquida ya que su consistencia debe ser más bien cremosa.
Adornar con una cucharada sopera de crema agria en el centro, almendras fileteadas tostadas y unas hojitas de perejil picadito. Si es de su gusto, esparcir pimienta gourmet.
Se puede servir en platos hondos soperos ó en tazas profundas de sopa, adornada como expliqué anteriormente.
Otra presentación que he visto y me parece muy peculiar y elegante es la crema de auyama como entrada servida en copas de champaña, con su adorno en el tope, por supuesto.
Una idea fabulosa es colocar en el fondo de la copa una cucharada sopera de sorbete de alguna fruta (como parchita, por ejemplo) que previamente esté helado del congelador de manera que no se mezclen, la idea es tomar la sopa y luego comer el sorbete con una cucharita de mango largo para pasar al próximo plato. ¡De lujo!